Una de las primeras actuaciones en viviendas fue la mini-reforma que realizamos en una casa de Zarautz - Gipuzkoa. Las condiciones para su realización fueron de cierta dificultad. Su "cambio radical" debía implicar una transformación de vivienda digna de la serie "Cuéntame" aalgo acorde con las necesidades de una pareja de nuestros días, todo ello pasando por una inversión mínima y como siempre un aprovechamiento máximo.
Los conceptos a potenciar estaban claros, una vivenda de tres fachadas con un potencial lumínico y de ventilación máximas y una superficie más que adecuada para contener un programa completo de vivienda. Para ello, tenía que despojarse de todo aquello que no fuese esencial y estrictamente necesario, recuperar los espacios residuales existentes e incorporarlos al uso y disfrute de la vida diaria. Ese aligeramiento de cargas supuso la generación de un único espacio compartido de SALON-COMEDOR-COCINA que se ha convertido en la tarjeta de visita de la casa y donde la luz natural es el invitado principal.